Cuando llegan los visitantes a Salvatierra de los Barros, procedentes de la atractiva ciudad que es “Sevilla la Chica”, como llaman a Zafra, distante unos 28 kilómetros de nuestro pueblo, inmediatamente antes de entrar en el mismo, se encontrarán con una glorieta que llamamos la Rotonda del Porrón, porque en el centro de la misma ha sido colocado no ha mucho, un descomunal botijo (los del pueblo a los botijos los llamamos “porrones”).
Esta gran pieza alfarera, fue realizada por los artesanos del pueblo y se erigió en el lugar como insignia y testimonio de nuestros antecedentes artesanos que datan del siglo XVI.
La fotografía nos representa un detalle de este símbolo, al fondo, aparece un magnífico edificio construido con mucho gusto y con las comodidades que los tiempos exigen, se trata de un hotel rural, más bien una Casa Rural, a la que su dueño Manuel Bellido Enrique la llama “Sierras y Valles”, está situada esta casa, en el alto de un cerrito desde cuyo lugar se avistan unos maravillosos paisajes que nos brinda la Sierra Suroeste, de las estribaciones de Sierra Morena, es un lugar apacible donde el visitante podrá descansar y obtener un servicio esmerado.
En cuanto a los cacharros, diremos que Salvatierra es uno de los pueblos alfareros con más actividad artesana de toda España en este oficio del barro, cuenta con un Centro de Interpretación de la Alfarería en su Museo; por lo que se refiere a la gastronomía, señalar que las buenas viandas que aquí se pueden encontrar son variadas y exquisita, sobre todo en derivados del cerdo y también sus buenos vinos.
Sus monumentos muy interesantes como son su Castillo, Iglesia Parroquial, conventos, ermitas e incluso rutas rurales por la periferia que le entretendrán al visitante de lo que un imperecedero recuerdo.
En Salvatierra hay mucho que ver…
23 de diciembre de 2014