En esta imagen que puede datar de 1928 – 1929, -nada más y nada menos que unos 83 años han pasado desde entonces-, se nos muestra el Castillo de Salvatierra de los Barros, esta es otra de las fotografías correspondiente a una colección de diez que el gran fotógrafo Garrorena de Badajoz le hizo a la fortaleza cuya colección es propiedad de la Diputación Provincial de Badajoz y que nosotros procuraremos ir sacando para que sean vistas por todos los amantes de nuestro pueblo y aficionados a estos temas y por considerar asimismo que son documentos con un gran valor histórico.

En dicha fotografía podemos ver la inmensa mole de esta fortaleza que fue captada en un día brumoso y nos paramos a considerar que dadas las escasas técnicas de la época su autor consiguió una estampa que podemos calificar como magnífica. Podemos apreciar perfectamente las mellas que el tiempo y el abandono por parte nuestra han hecho en este edificio tan emblemático y que estuvo sometido a esta dejadez e indiferencia desde los lejanos tiempos en que los moradores del mismo marcharon de allí, y si el Castillo logró llegar hasta nuestros tiempos en una condiciones más o menos precarias se debe a su gran reciedumbre que logró mantenerlo milagrosamente en pie hasta que se hicieron de él las actuales manos inglesas que lo compraron y adecentaron.

Ahora nos lamentamos de no poderlo visitar, qué le vamos a hacer, nosotros consideramos que es “nuestro” puesto que es la enseña característica de Salvatierra de los Barros y nos consuela pensar que nadie se lo podrá llevar del lugar; la mayoría de los vecinos siempre lo tenemos en nuestra retina puesto que nada más salir de nuestras casas lo vemos en el alto de la Sierra de los Helechales, dominando el paisaje, ahí está como vigía permanente del pueblo, es nuestro centinela y para los que vivimos fuera cuando vamos acercándonos al pueblo lo divisamos en la lejanía y lo primero que pensamos es: “Mira allí está el Castillo de Salvatierra”, es una estampa bonita que nunca nos cansaremos de admirar.

En fin, ahí dejamos la foto para la admiración de todos aquellos que queremos lo “nuestro”.