En el Barrio de Triana o de la Puente, como también es conocido, vemos esta pequeña y humilde casa, la que se conserva guardando su primitiva estructura desde que fue construida, es uno de los escasos vestigios que quedan en el pueblo de esa arquitectura urbana extremeña de otros tiempos y que conoció el viajero en sus tiempos mozos, por eso precisamente le llama la atención y ue ha querido reflejarla en esta imagen.

Es una casa modesta, de esas llamadas mancas, con un pequeño ventanuco por donde le entra una escasa claridad al doblado, las habitaciones está situadas sólo al lado izquierdo.

Así eran la mayoría de las casas en los tiempos del que esto escribe, muy modestas, bajitas que casi se llegaba a tocar las tejas de muchas de ellas con la mano y de ujna habitabilidad muy precaria.

29 de noviembre de 2014